
¿Te gustan las drogas? ¿Son tu pasión? ¿tu vida? Pues tú eres tonto.
ADVERTENCIA: 1) me refiero a excesos destructivos de drogas duras que tienen secuelas muy graves, 2) es un post emocional (hecho desde la tristeza y la rabia)
Las drogas son un puto atajo a tu felicidad, o peor, una ilusión de felicidad que juzgamos paradisíaca pero que pronto se descubre como infierno. Las drogas nos hacen caer en la mentira de la química del cerebro, la mentira de que lo psicológico está en el cerebro. Pero no, la vida psicológica está en lo que hacemos, pensamos y sentimos respecto al mundo. La vida está en establecer vínculos entre nosotros y el mundo. Pero las drogas nos hacen creer que nuestra relación con el mundo ya es muy profunda y sagrada pero no. Apesta. Con las drogas caemos en la ilusión de creer estar explorando lo profundo de nosotros y de la vida, pero no. Es pura satisfacción por una experiencia vacía, es experiencia de recompensa sin recompensa. Es como que te den un premio sin haber hecho el huevo, es como un inútil recibiendo un Nobel.
Sigue leyendo